La depresión es más severa y duradera que la tristeza normal. Todos en algún momento atravesamos por etapas difíciles en nuestras vidas; por eso es primordial entender que sentirse triste temporalmente es muy diferente a estar deprimido o a sufrir de depresión.
La depresión interfiere con otros aspectos de tu vida, como el trabajo, la universidad, escuela o relaciones interpersonales, puede incluso llevar a la incapacidad funcional, pero con el tratamiento adecuado muchas personas pueden superarla y llevar una vida feliz y saludable.
Entre las causas se cuentan predisposición biológica y genética, factores psicológicos y medioambientales. Sin embargo, sus síntomas son múltiples y varían según la persona, a continuación algunos de ellos:
- Irritabilidad
- Pérdida o aumento de peso
- Insomnio o hipersomnia
- Agitación o inhibición psicomotriz
- Fatiga o pérdida de energía casi cada día
- Descuido del cuidado personal (incluye el aseo y la vestimenta)
- Sentimientos de inutilidad o de culpa excesivos
- Falta de concentración, incapacidad de ejecutar satisfactoriamente tareas habituales
- Pérdida de la memoria (olvidos frecuentes)
- Pensamientos recurrentes de muerte, (pueden acompañarse de ideación suicida recurrente)
- Aumento o disminución del apetito, ingesta compulsiva de alimentos
- Consumo aumentado o abuso de drogas y/o alcohol
- Cambios bruscos en el temperamento y estado de ánimo
- Hablar sobre la muerte o escribir sobre este tema
- Aislamiento social o retraimiento
- Conductas auto-lesivas, incluye el fenómeno de “cutting)
- Poco interés por las cosas que anteriormente disfrutaba
- Ansiedad con o sin ataques de pánico
- Propensión a sufrir accidentes (tropezones, caídas, accidentes de tránsito, etc)
Sin embargo, especialistas de la salud mental han detectado los tipos de depresión que una persona puede desencadenar:
1. El trastorno distímico
Es un tipo de depresión subclínica, que permite que una persona mantenga un aparente nivel “normal” de funcionamiento, aunque mantiene un estado de desánimo e insatisfacción constantes ( el popularmente así llamado “amargado” u “Olafo”). Los trastornos distímicos son crónicos y de larga duración; pueden incluso acompañar al paciente durante toda su vida, cuando no son detectados y tratados
2. El trastorno depresivo
Este puede ser leve, moderado o severo (este último antes conocido como depresión mayor)Es un trastorno clínico que interfiere con la capacidad de una persona para su correcto funcionamiento a nivel interpersonal, social, laboral y familiar, esto es , afecta el comer, dormir, trabajar, estudiar o participar en las actividades diarias, como lo haría normalmente. Los episodios depresivos deben durar por lo menos dos semanas, pueden además complicarse con síntomas somáticos o de ansiedad, ( en el caso de las depresiones leves y moderadas) y con síntomas psicóticos ( en el caso de las depresiones severas)
3. La depresión postparto
Es un tipo de depresión que se produce en las mujeres luego de dar a luz; toda mujer puede presentar un estado depresivo, durante el primer mes posterior al parto, sea este el primero o consecutivo, sin embargo, en la mayoría de los casos evoluciona favorablemente en menos de una semana, si se prolonga, amerita tratamiento. Se la ha relacionado con la supresión hormonal brusca que ocurre luego el alumbramiento
4. La depresión bipolar
Es una forma de la enfermedad maníaco-depresiva en la cual el paciente presenta un cuadro depresivo que puede llegar a ser severo, pero que eventualmente ( usualmente por el uso de tratamientos con antidepresivos), puede complicarse con un episodios maniaco (euforia y elevación del estado del ánimo)
5.- La depresión unipolar
Antes conocida como depresión reactiva, incluye el término “duelo complicado”. Esta se produce luego de una pérdida significativa para el individuo (muerte de alguien cercano, pérdida de la rutina de vida, cambio de vecindario) o de un trastorno adaptativo (presencia de situaciones stressantes que el individuo es incapaz de solucionar o de manejar – ej. Ser víctima de Bullying, stress laboral, síndrome de burnout, ser víctima de un secuestro o asalto). Este tipo de depresión, o mejor dicho, proceso de duelo, debe de durar no más de 40 días (hasta 60 días según algunos autores)y solucionarse espotáneamente, cuando esto no ocurre, o se complica con otro tipo de síntomas (conductuales o psicóticos- alucinaciones, delirios) debe intervenir el psiquiatra.
Pensamientos Suicidas
En algunas personas, la depresión puede provocar pensamientos sobre el suicidio, siendo la enfermedad psiquiátrica con más riesgo de muerte (Un 5% de la población mundial experimentará un episodio depresivo a lo largo de su vida, de estos, entre un 10 y un 15% se complicarán con ideaciones suicidas).
Los intentos de suicidio en pacientes depresivos son especialmente comunes entre las mujeres menores de 35 años (más entre 15 y 24 años), los hombres lo hacen en edad más avanzada. Por clases sociales es más común en las más bajas, pero más efectivo entre las clases altas y grupos profesionales de alto estatus económico.
El ambiente que rodea a una persona que sufre depresión es fundamental para lograr su rehabilitación. La comprensión y el cariño de los familiares y allegados es clave, como lo es la paciencia y la motivación. El tratamiento contra la depresión es de dos tipos: farmacológico y psicoterapia. Dependiendo del problema puede ser necesario uno u otro, o una combinación de los dos.
Aparte del tratamiento farmacológico o psicoterapéutico es importante que el paciente evite depresiones y pensamientos suicidas siguiendo estas recomendaciones:
- Tener pensamientos positivos
- Cuidar la salud física
- Aceptarse a uno mismo.
- No compararse con otras personas
- Expresar las emociones
- Seguir en todo momento y hasta el final el tratamiento indicado por el especialista
- Reunirse periódicamente con el terapeuta
- Comer una dieta equilibrada
- Hacer ejercicio físico ( hacer ejercicio por las mañanas sería un factor preventivo)
Si piensas que estás sufriendo de depresión, busca a un psiquiatra, quien te ayudará a lidiar con tus sentimientos, darte un diagnóstico y brindarte el apoyo que necesitas para manejar tu depresión.