La característica esencial del trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) es la presencia de obsesiones (pensamientos, imágenes, sentimientos) o compulsiones (actos repetitivos, movimientos) de carácter recurrente lo suficientemente graves como para provocar pérdidas de tiempo significativas.
La esquizofrenia es un trastorno mental grave que quien la padece presenta alteraciones de la personalidad, alucinaciones y pérdida del contacto con la realidad.
La bipolaridad tipo II es una afección de la salud mental y se presenta por períodos alterantes de hipomanía y depresión o cambios bruscos en el estado de ánimo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se calcula que el 0.5% de la población mundial sufre de bipolaridad tipo II.